PortalGuarani.com
Inicio El Portal El Paraguay Contáctos Seguinos: Facebook - PortalGuarani Twitter - PortalGuarani Twitter - PortalGuarani
GUSTAVO LATERZA RIVAROLA

  A GOLPES SE LABRA LA HISTORIA - Por GUSTAVO LATERZA RIVAROLA - Domingo, 04 de Noviembre de 2012


A GOLPES SE LABRA LA HISTORIA - Por GUSTAVO LATERZA RIVAROLA - Domingo, 04 de Noviembre de 2012

A GOLPES SE LABRA LA HISTORIA

 

 Por GUSTAVO LATERZA RIVAROLA

El gran esfuerzo que se está haciendo por elevar el término “golpista” al nivel de insulto político, obtiene, hasta ahora, resultados decepcionantes. El obstáculo reside, a mi modo de ver, en que saber dar golpes de Estado siempre fue un arte finamente cultivado en nuestro país, tanto es así que antes había que pronunciarlo en francés (coup d’État).

Nuestro primer gobernador, Domingo Martínez de Irala, ganó el cargo merced a la destitución sorpresiva y violenta del Adelantado don Álvar. Durante nuestros primeros cincuenta años de existencia política habremos tenido otros tantos incidentes similares, y amagues, ensayos y conatos de tales. Los sucesos del 14 y 15 de mayo de 1811 constituyeron claramente un golpe militar. La apoteosis del Dr. Francia como dictador vitalicio fue consentida por un congreso de diputados encerrados y retenidos como rehenes del ejército, receta repetida por don Carlos A. López, en marzo de 1841. Y abstengámonos de aburrir citando otra vez los casos ocurridos en la era constitucional.

Los golpes -militar, civil o cívico militar- hacen parte de nuestras tradiciones políticas más venerables.

Si nos volviésemos muy susceptibles con los golpistas, tendríamos, por comenzar, que cambiarle la denominación a un centenar de calles, a unas decenas de rutas, de localidades y de escuelas, en los que nombres de golpistas de todos los tiempos (colorados, la gran mayoría) lucen orgullosos su prosapia histórica. En este mismo momento se aprestan a llevar al Panteón de los Héroes a un exitoso golpista, el Cnel. Rafael Franco, mientras su víctima principal, el Dr. Eusebio Ayala -de heroísmo bastante más eminente- continuará yaciendo en la llanura.

Los golpes de Estado no son más que la prosecución del cambio de opinión por otras vías (diría Clausewitz); sin embargo, mudar de opinión no produce más riesgo que el de ganarse el calificativo de incoherente, que, en política, nunca mató a nadie. Véase este caso: Escribía Juan Sinforiano Bogarín en su diario, en los primeros días de setiembre de 1921: “La presidencia del Señor Manuel Gondra -hombre de vastos conocimientos, literato, diplomático de alto relieve y de una honradez a toda prueba- se inauguró el 15 de agosto del año pasado, bajo los mejores auspicios para el bienestar general del país y de la Iglesia. Para decirlo todo, la asunción del Sr. Gondra a la primera magistratura fue tan grandiosa que la historia no señala otra igual”.

Ahora lo que escribió en el mismo diario íntimo, dos meses después: “Desde el advenimiento del Señor Gondra en el poder se sucedieron tantos acontecimientos, como la aprobación del proyecto de divorcio en la Cámara de Diputados, la quiebra inesperada de tres bancos, la propaganda insensata de los anticatólicos contra sacerdotes, contra la Religión y el mismo Cristo, la división del partido radical, la injerencia, por primera vez, de los católicos, como tales, en las elecciones, etc., que fueron suficiente motivo para que el pueblo creyera y afirmara que el Señor Gondra era un yetudo, como se está diciendo en todo el país en el momento que estoy escribiendo: noviembre 7 de 1921, 10.40 a.m.”.
Monseñor Bogarín era veleidoso, entrometido, hablaba más de la cuenta y exponía, con típica arrogancia episcopal, opiniones exaltadas en materias que no eran de su incumbencia oficial. Un golpista de la palabra, en resumen. Ninguno de estos defectos mermó su figura histórica, como tampoco las que endilgó a Gondra afectaron la de este.

En estas cosas, la política es como el boxeo, los espectadores vitorean por igual a los que dan golpes exitosos cuanto a los que demuestran habilidad para esquivarlos. A Fernando Lugo se le critica que, pudiendo prever y eludir el derechazo, no lo hizo; mostró franco el mentón… y acabó en la lona.

Suponemos que golpista, vocablo impotente para agraviar, desmayará en el vocabulario de calificativos innocuos. Peor aún, sospecho que a más de un político halaga secretamente. Muchos que se quejan de haber sido víctimas de un golpe, ayer nomás participaban de aquellas sigilosas maniobras que provocaron la renuncia de Raúl Cubas a la presidencia de la república, peripecia de la que hoy se regodean y se congratulan.

La historia, al menos la política, se labra a golpes; a veces golpes de Estado, a veces golpes de suerte.

 


Fuente: ABC Color (Online)

www.abc.com.py

Sección: OPINIÓN

Domingo, 04 de Noviembre de 2012

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

ENLACE INTERNO A ESPACIO DE VISITA RECOMENDADA

EL IDIOMA GUARANÍ, BIBLIOTECA VIRTUAL en PORTALGUARANI.COM

(Hacer click sobre la imagen)

 

 

 

ENLACE INTERNO A ESPACIO DE VISITA RECOMENDADA

(Hacer click sobre la imagen)

 

 

 

 

ENLACE INTERNO A ESPACIO DE VISITA RECOMENDADA

(Hacer click sobre la imagen)









Buscador PortalGuarani.com de Artistas y Autores Paraguayos

 

 

Portal Guarani © 2024
Todos los derechos reservados, Asunción - Paraguay
CEO Eduardo Pratt, Desarollador Ing. Gustavo Lezcano, Contenidos Lic.Rosanna López Vera

Logros y Reconocimientos del Portal
- Declarado de Interés Cultural Nacional
- Declarado de Interés Cultural Municipal
- Doble Ganador del WSA