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LUIS BAREIRO

  ESOS NÚMEROS MALDITOS - Por LUIS BAREIRO - Domingo, 22 de Septiembre de 2013


ESOS NÚMEROS MALDITOS - Por LUIS BAREIRO - Domingo, 22 de Septiembre de 2013

ESOS NÚMEROS MALDITOS

 

Por LUIS BAREIRO

 

lbareiro@uhora.com.py

Los paraguayos tenemos una mala relación con los números. Nos molesta apuntarlos y hacerles caso. Odiamos ordenar nuestras vidas de acuerdo con lo que esos fríos e insensibles garabatos revelan. Acostumbrados a improvisar, los números definitivamente nos irritan. Son para los gringos, no para nosotros.

Fíjense nomás en los números del Ministerio de Salud y se darán cuenta de lo poco que nos fijamos en ellos.

De las 36.000 personas que aparecen en las planillas del personal del Ministerio de Salud, solo 5.000 son médicos, el 13 por ciento; 11.000 son funcionarios administrativos, y de esos, solo 1.000 tienen alguna especialización administrativa.

Esto quiere decir que por cada médico contratado hay dos personas sin formación académica alguna que ocupan cargos administrativos inespecíficos; pueden abrir o cerrar puertas, atender el teléfono, cebar el tereré o acicalarse las uñas.

Los números también pueden llegar a ser desconcertantes si hacemos foco en los médicos y sus especialidades. Si consideramos las razones por las que la mayoría de los paraguayos recurren a un hospital (accidentes y problemas cardiovasculares), veremos que la demanda principal es por traumatólogos, cardiólogos, cirujanos y clínicos.

De acuerdo con los registros oficiales de Salud, sin embargo, el país cuenta hoy con 133 cardiólogos y ¡2.446 nutricionistas!; tenemos 176 traumatólogos y ¡3.200 sicólogos!; contamos con 264 cirujanos y con ¡4.500 odontólogos!

Las cifras son producto de la proliferación de universidades de garaje que ofertan carreras de dudosa calidad académica, pero de rápida obtención de título habilitante.

Empezamos a entender por qué nadie quiere ver los números. Son desquiciantes. Y se ponen peor cuando aterrizamos en casos concretos. Por ejemplo, si revisamos la crisis del Hospital Nacional, donde médicos y enfermeras amenazan con ir a la huelga porque desde hace meses no les pagan el salario.

Ocurre que en casi todos los hospitales públicos los funcionarios tienen seis tipos diferentes de bonificaciones y gratificaciones. En el Hospital Nacional hay 16.

Así, mientras un médico del Instituto del Cáncer o de cualquier otro hospital gana cinco millones de guaraníes por vínculo, en el Nacional gana diez. Un director que en el Instituto del Cáncer gana poco más de nueve millones de guaraníes, en el Nacional gana más de veinte.

Si olvidamos la odiosa precisión de los números podemos decir que estas bonificaciones son absolutamente justas. El problema es que los números son la medida de la realidad y no podemos obviarlos.

El presupuesto total para pagar bonificaciones en el Nacional es de 20.000 millones de guaraníes. Y las bonificaciones que se asignaron costarán 25.000 millones.

Solo en este hospital hay un agujero de 16.000 millones. Los malditos números no cierran.

Son horribles, pero más vale que les hagamos caso.

Nos va la salud en ello.

Fuente:  ULTIMA HORA (ONLINE)

Sección OPINIÓN

Domingo, 22 de Septiembre de 2013, 03:00

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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