MANDU'A
Revista de la Construcción
Nº 391
AÑO XXXIII
Noviembre 2015
VIVIR EN UN ESTADO DE DERECHO
En plena campaña electoral para la renovación de las autoridades municipales, el desplome del techo del Colegio Nacional de Lambaré, acaecido el pasado 30 de setiembre, que dejó un saldo de catorce alumnos heridos, generó un vendaval de airados reclamos y protestas que, día a día, a medida que la olla se iba destapando, dio lugar a un estallido de denuncias, en distintos puntos del país, por hechos similares relacionados con obras realizadas con dinero del Fonacide, todas de pésima factura y absolutamente todas con metidas de mano en la lata.
Este clamor, que se sumó a las protestas iniciadas en agosto por los estudiantes secundarios del Colegio Cristo Rey, contra “un sistema educativo público deficiente” y se expandió como reguero de pólvora por el estamento estudiantil, fue acogido no solo por los alumnos de otros colegios de segunda enseñanza, públicos y privados, también por los estudiantes de la Universidad Nacional de Asunción y sus filiales, quienes, en una actitud ya más decidida y beligerante, “tomaron” el rectorado y varios decanatos, declarándose en vigilia permanente, exigiendo la renuncia del rector, así como la de varios decanos y profesores y la intervención de la justicia. El ex rector Froilán Peralta así como el ex decano de veterinaria, Juan Gualberto Caballero, investigados por la Justicia, junto con varias otras funcionarias del rectorado, están alojados en Tacumbú y en el Buen Pastor, respectivamente. En cuanto a la eclosión estudiantil, aunque se ha moderado, prosigue en distintas facultades y ya tiene en su haber más de cincuenta “renunciados” y, sólo en la Facultad de Ingeniería, cincuenta y ocho denunciados. En esta casa de estudios, uno de los primeros en tomar las de villadiego fue el decano Isacio Vallejos, viejo conocido de Mandu’a, seguido por su reemplazante y alter ego, María Teresa Pino.
En Lambaré, al ex intendente y actual postulante a la re-reelección, Roberto Cárdenas, el citado derrumbe le está costando un ojo de la cara, está siendo investigado por la fiscalía que ha incautado del municipio nutridas carpetas de documentos, se le sumaron numerosas denuncias de predios escolares de similar factura, pésima construcción e increíble costo, y a su legajo se ha agregado otra acusación, esta vez por sobrefacturaciones de la merienda escolar, lo que facultó a la fiscala Blanca Agüero ordenar su detención, la cual no fue recibida por la jueza de garantías de San Lorenzo, María Elena Cañete, aduciendo presentación fuera de horario, lo que posibilitó la recusación de Cárdenas, logrando apartarla y que el nuevo fiscal, Miguel Quintana, levantara la orden de detención porque, según afirmó, “no encontró elementos” para la imputación. El fiscal general reconfirmó a Agüero pero, asimismo, ordenó la auditoría de lo actuado. Cárdenas, consultado por la prensa, manifestó que no renunciará a su postulación y que todo era una orquestada campaña contra su partido. Un sector de la ciudadanía lambareña se manifiesta, todas las noches, contra su candidatura frente al municipio, reclamando su renuncia y pidiendo a los votantes anular su voto para permitir una nueva elección, ya que, en la otra vereda, su contendiente del PLRA, Armando Gómez, también está imputado por otra causa penal, la de lavado de dinero. Es la primera vez, en los anales de la justicia electoral, que dos candidatos a la intendencia municipal están incriminados por hechos que, de confirmarse, los conducirán a la cárcel, y en la que ambos, como si nada hubiera ocurrido, se aferran a sus pretensiones.
En el pasado, Mandu’a recuerda varios otros casos muy parecidos al del colegio lambareño, y la revista quiere refrescar la memoria del lector. El derrumbe en el 2008 del costosísimo “supercolegio” de Luque, a cargo del Consorcio RAG, liderado por el ingeniero Carlos Vicente Gueyraud Caballero. El techo de dos aulas de la escuela Manuel Ortiz Guerrero de la compañía Lomas del distrito de Alberdi, caídos, en abril del 2009, estando en plena construcción por la empresa del ingeniero Luís Alberto Díaz. El derrumbe acaecido el 30 de enero de 2010, durante las vacaciones estivales, en el corredor de la Escuela San José de Limpio, obra realizada por Gopa SA, propiedad del ingeniero Julio César GorostiagaPappalardo. En setiembre del 2012 el techo del aula del cuarto grado de la Escuela Básica 1007 Centenario de la Epopeya Nacional, del barrio Mburucuyá de Asunción, se desplomó destruyendo todo el mobiliario.
Todos estos casos tuvieron estado público; de ellos tomó conocimiento el Ministerio de Educación y algunos, incluso, fueron denunciados ante la fiscalía. Que sepamos, ninguno de los responsables fue sancionado ni condenado.
Esperamos que esta vez, aquellos que nos sentimos parte de la sociedad sana del país no bajemos los brazos, que exijamos justicia hasta que los corruptos sean ejemplarmente sancionados y la impunidad entre en retirada. Y que el país pueda comenzar a vivir en un estado de derecho.
Fuente Digital: Mandua.com.py (Online)
Registro: Noviembre 2015
Revista MANDUA N 391 - Noviembre 2015 - Paraguay - PortalGuarani by PortalGuarani4
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